jueves, 19 de enero de 2023

Los Microbeneficios de café, un sistema agroalimentario exitoso y sostenible en la zona de los Santos

La zona de Los Santos, constituida por los cantones Dota, Tarrazú y León Cortés, se ubica al suroeste del Valle Central y ha sido una de las zonas productoras de café más importantes del país, en ella se producen alrededor del 30% de la producción nacional, de un café reconocido nacional e internacionalmente como café tipo Tarrazú. 

La producción de café es la actividad fundamental para el desarrollo económico de la zona, ya que en ella se cultivan más de 23.000 hectáreas compuestas por pequeñas fincas de 2.5 has en promedio en manos de más de 6.500 pequeños agricultores familiares.

En la zona de Los Santos, las pequeñas fincas de café tradicionalmente entregaban su producto a las 3 cooperativas existentes (CoopeDota, CoopeTarrazú y Coopellanobonito) o los beneficios privados, que producían tanto para la exportación, como para el mercado nacional.

No obstante, a principios de la década de los 90 debido a la crisis cafetalera generada por la reducción en los precios internacionales, se inició el establecimiento de pequeños microbeneficios familiares o asociativos, que les ha permitido a los agricultores participar en el beneficiado, con la finalidad de agregar valor a la producción, tener más poder en la cadena productiva y obtener mejores resultados en el proceso de comercialización.

Progresivamente se fueron estableciendo pequeños microbeneficios en las comunidades, de la zona que han llegado a sumar más 40, en los que las pequeñas unidades familiares procesan el café, para lo que han adquirido los equipos básicos de despulpado, secado, selección y empacado de café oro para exportación y en algunos casos, molienda y empacado de producto para el mercado nacional.

Los microbeneficios familiares o asociativos se han convertido en una alternativa económica y productiva, ya que procesan su propia producción y la de otros productores familiares de la zona, establecen vínculos comerciales con empresas exportadores y obtienen mejores precios para el producto final.

Esta iniciativa ha generado en los tres cantones de la zona de Los Santos, microbeneficios de diverso tamaño y características, que se han convertido en verdaderos modelos de producción, procesamiento y comercialización de café en pequeña escala.

Estos microbeneficios procesan el grano de sus propias fincas, en áreas entre 1.5 y 5 hectáreas, en plantaciones de variedades de caturra y catuaí, con prácticas de manejo de cultivo de fuerte utilización de mano de obra familiar, en la siembra, fertilización, fumigación para el combate de plagas, limpieza, deshija y en la recolección de la cosecha. Los microbeneficios reciben y procesan volúmenes entre 3.000 y 10.000 fanegas de café maduro, en los meses de octubre a enero.

Estas unidades agroindustriales, disponen de equipos en pequeña escala para realizar las diferentes prácticas de lavado, despulpado, selección, secado, tostado, molido y empacado del grano como café oro o como producto final, con distintos niveles de eficiencia del proceso, y de calidad según el tipo de café elaborado.

En los microbeneficios café, ha sido notable la innovación en los procesos de producción, desde cafés bajo el procedimiento tradicional de lavado, hasta cafés con todas sus mieles(tipo honey) y formas de secado plenamente al sol o mixtos utilizando secadores y una rigurosa selección del grano, que generan lotes de café especializado y diferenciado tanto para el mercado nacional como internacional.

También se han introducido innovaciones en las formas de manejo y utilización de los desechos líquidos y sólidos del proceso, en la elaboración de subproductos y bioproductos a partir de esos desechos, como abonos orgánicos y en la reducción de la contaminación ambiental.

Los microbeneficios han buscado nuevas alternativas de comercialización del café, tanto de café oro para el mercado internacional, logrando la venta directa de lotes de café a compradores de café de calidad que llegan a los propios microbeneficios desde países de Europa, Japón, Corea y Estados Unidos, logrando precios más altos que en los de los mercados tradicionales), como del café tostado y molido como producto final empacado con diferente tipo de tueste, como cafés finos y gourmet.

 Estos microbeneficios tienen sus propias marcas, como Monte Copey, la Joya, la Cumbre, Don Mayo, Don cayito, Doga, Seguetos, la Candelilla, cerro Alto, Cerro verde, Cerro la Cruz, doña Lina, los que se venden a nivel local y regional y han logrado un reconocimiento por su calidad.  Algunos microbeneficios se han involucrado en el impulso de ferias agroturísticas, como las ferias del café y las ferias de microbeneficios que se han realizado en Dota, Tarrazú y León Cortés, así como la participación de éstos en ferias regionales y nacionales, promoviendo de esa forma las cadenas cortas de comercio.

Un hecho importante, en la consolidación de los microbeneficios ha sido el impulso del comercio virtual de sus tipos de café, lo que ha facilitado el comercio hacia zonas urbanas y ciudades y la entrega directa del producto a los consumidores, así como la obtención de la denominación de origen al café Tarrazú

 Esta zona del país, ha alcanzado una dinámica productiva de gran impacto en la generación de ingresos, empleo y capacidades en la economía y población local, que sin embargo presenta desiguales niveles de desarrollo y genera uno de los más notorios fenómenos migratorios hacia el exterior(fundamentalmente a Estados Unidos).

 Tanto los cantones como sus distritos cuentan en general con los servicios públicos básicos: agua, electricidad, teléfono, servicios de salud, escuelas (primaria), colegios (secundaria), así como servicios financieros y comercio en general.

 En la zona de los Santos, se puede afirmar que la subsistencia de las familias rurales está ligada a la finca, que existe una relación directa entre la agricultura y el desarrollo humano de dichas familias y que los medios de vida predominantes de dichas familias están ligados a los recursos que poseen primordialmente dentro de sus fincas.

 Esta relación de subsistencia tan marcada (familia – finca) sin embargo, los hace vulnerables a presiones externas o factores de riesgo que pueden alterar aspectos claves dentro del funcionamiento interno de la unidad productiva, tales como una plaga que puede afectar las cosechas, alteraciones en el clima, así como reducción en los precios del café o menor acceso a los mercados.

 Frente a esos factores, las unidades productivas familiares y los sistemas agroalimentarios que conforman, han desarrollado continuamente estrategias para defenderse de éstos factores, las cuales pueden ser técnicas o tecnológicas como la diferenciación tanto de calidad como de manejo ambiental del café, de diversificación agrícola en combinación con otros cultivos, como los frutales de altura y la apicultura, u organizativas como la asociatividad de los productores o socioeconómicas, como el que miembros de la familia se dediquen a otras actividades complementarias, como el agroturismo.

 En la zona de los Santos, el sistema agroalimentario de los microbeneficios de café ha sido un sistema sostenible a nivel productivo, socioeconómico y ambiental, además de un sistema competitivo que ha introducido innovaciones tecnológicas en los procesos productivos y en los mecanismos de comercialización.

 Mediante este SIAL, la zona ha logrado una dinámica territorial equitativa e incluyente, con gran democracia económica y distribución de la riqueza, en la que los actores locales se comprometido en la búsqueda de alternativas de producción y comercio y han elevado los niveles de vida de las familias y de la población de esos cantones

martes, 17 de enero de 2023

Efectos de la pandemia sobre los sistemas agroalimentarios y la pequeña producción familiar

Importancia de la pequeña producción familiar

 Se estima que el sector de la pequeña producción familia se compone de entre 78 mil y 90 mil productores, a las que hay que agregar alrededor de 10 mil pescadores artesanales que son los que garantizan la producción de alimentos y la seguridad alimentaria del país.  

 La agricultura familiar representa, más de 50 mil pequeñas fincas y el 55% de las fincas dedicadas a la actividad agropecuaria en el país. (RedAgricultura Familiar, 2017).   

Estas unidades de producción familiar, aportan, el 85% de la producción nacional de frijol, el 80% de la cebolla, el 75% de la de yuca, el 70% de la papa, el 70% de la de café, el 55% de la de leche y el 40% de la carne, siendo la principal y a veces única fuente de empleo e ingresos de la población rural. (Masís,G.2018,p.229)

La producción familiar se encuentra en el marco de la actividad agrícola, que genera en la actualidad, 233.500 empleos, un 11,7% de la población ocupada y aporta el 40% de las exportaciones.

Los trabajadores agrícolas por cuenta propia y sus familiares no remunerados, en su mayoría agricultores familiares, tienen el nivel más bajo de ingresos de las diferentes categorías de inserción laboral en las zonas rurales.

En el país, la pobreza y la pobreza extrema han tendido a ser más elevadas en las zonas rurales, pero también la informalidad del empleo y el bajo acceso a redes de protección social, lo que genera una situación de gran vulnerabilidad.

La pobreza rural se ha asociado tradicionalmente con la existencia de un gran contingente de pequeños productores agrícolas de baja productividad, con poca tierra y de baja calidad, y acceso limitado a bienes públicos.

De manera que si la pobreza global es del 24.2% en las zonas rurales, los mayores niveles están en las zonas Brunca y Pacífico Central, con el 30.3% y 29.8% respectivamente, el deterioro de la pobreza podría ser aún mayor en ellas y el efecto sobre la inseguridad alimentaria sería negativo.

La incidencia de la pobreza no solo es mayor entre las personas que viven en áreas rurales, sino también entre niños, adolescentes y jóvenes; indígenas; mujeres en edad de trabajar; personas con niveles educacionales más bajos, y quienes no alcanzan a cubrir sus necesidades básicas.

Los efectos de la pandemia sobre la producción agroalimentaria

La producción agroalimentaria y algunas de sus principales cadenas productivas, se vieron afectadas por las medidas sanitarias adoptadas por la pandemia, reduciendo considerablemente el consumo y la demanda de productos alimentarios, sin embargo los productores lograron enfrentar los cambios en los procesos de comercialización mediante mecanismos para reducir la producción, adecuar las líneas de procesamiento y buscar mercados alternativos.

Las cadenas de producción de porcicultores, avicultores y en menor medida horticultores, estuvieron imposibilitados de poder colocar sus productos, los cuales en su mayoría se comercializan a nivel local.  En el caso del cerdo, se calculó entre $7 y $8 millones la pérdida en productos que no se estaban vendiendo y se buscó la forma de congelarlos para que no se perdieran.  Según los porcicultores el consumo de carne de cerdo cayó en un 30% por la crisis.

En el caso del mercado avícola, los grandes suplidores del mercado nacional, constituido por las empresas PIPASA y Pollo el Rey, con cerca del 70% del mercado nacional, se  vieron impactados, el primero entre un 15 y un 20% de sus ventas totales y el segundo de una manera más crítica porque han llegado al 35% en la reducción de sus ventas, a partir del cierre de restaurantes, bares y hoteles.

El impacto de la pandemia fue considerable en algunas actividades agrícolas tales como la producción de flores y follajes, pero también en piña, papa, yuca, café, cebolla, melón, plátano y miel de abeja, que de acuerdo al Ministerio de Agricultura y Ganadería (MAG) registra una afectación total de ¢28.055 millones (LN.com,21-8-2020).

La actividad agropecuaria según el Indice Mensual de Aactividad Económica(IMAE), el decrecimiento interanual(2020-21) fue de 1.3% por la menor producción de flores, follajes y plantas, descenso que no ha sido tan pronunciado debido a que las exportaciones de azúcar, café oro y carne impulsaron al sector agrícola y a que la producción interna se ha mantenido relativamente estable gracias a que los mercados locales como las ferias del agricultor se han mantenido funcionando.

A la situación de descenso en la demanda interna de productos, se sumó el diferendo con el vecino país de Panamá por el bloqueo impuesto a las exportaciones de algunos productos alimenticios que ha afectado a productos de 19 plantas costarricenses de lácteos y derivados lácteos, carne de bovino, carne de cerdo, carne procesada de aves y de embutidos, que en lo que respecta a la leche ha supuesto la prohibición de exportación de 80 mil litros diarios de leche.  Las Autoridades del Ministerio de Agricultura elevaron la denuncia a la Organización Mundial del Comercio.(LN.com,6-8-2020)

El impacto de la pandemia sobre la producción agrícola

Las pequeñas y medianas fincas familiares que venden sus productos a comercializadoras o a comerciantes intermediarios, han sido severamente afectadas y estuvieron en peligro de no poder continuar trabajando. (CRHOY.com,19-8-2020)

Además de los efectos sobre la producción de las industrias cárnicas y avícolas, otras actividades como la producción de queso y derivados lácteos en manos de pequeños productores, habían reportado desde inicios de la pandemia haber sido afectadas debido a la interrupción de las cadenas de comercialización generada por el cierre de hoteles y restaurantes.

En algunas zonas rurales del país, como Upala, Alfaro Ruíz y Santa Cruz de Turrialba, los pequeños productores de leche y de quesos, tuvieron problemas para colocar los productos y vieron una reducción significativa de la demanda de los mismos.  Los afectados de Upala unos mil pequeños lecheros producen de 25.000 a 30.000 litros diarios, pero por la reducción de sus compras debieron despedir a unos 2.000 empleados y botar 1.200 litros de leche. 

En Zarcero, el gerente de la cooperativa Coopebrisas, advirtió de que 69 productores pequeños tuvieron la entrega del alimento en peligro. Esto porque la empresa, desde hace varios años, distribuye productos a los hoteles, sobre todo en Guanacaste, los cuales cerraron sus puertas y dejaron de comprar.  Mientras que en Santa Cruz de Turrialba, muchos pequeños productores que no van a las ferias del agricultor a vender quesos, dependen de las compras de intermediarios quienes llegan a sus fincas, por lo que fueron los que más sufrieron con la menor demanda. (Alterdescr,4-2020)

El Ministerio de Agricultura y Ganadería estimó en 2020 que la pandemia había afectado la producción agrícola destinada al consumo interno en un monto cercano a ¢1.322 millones, luego de consultas hechas a los productores por los funcionarios de las oficinas regionales.

Ubicando la afectación por cultivo, señaló que el mango, tuvo una pérdida estimada de ¢350 millones, le siguieron el plátano con ¢269,5 millones; la zanahoria con ¢250 millones; la leche con ¢156,8 millones; la cebolla y el ajo con ¢76 millones; y el queso con ¢ 63 millones.

También se encontraron pérdidas importantes en fresas, frutas, guayaba y otras hortalizas, además en empresas que producen para el Programa de Abastecimiento Institucional (PAI), que en el sector de cárnicos reportaron ¢194 millones y en el de pollo y huevo, por ¢121 millones, para un total de ¢315 millones. (LN,Economía,17-4-20)

Implicaciones para el sistema agroalimentario

A pesar del impacto en la producción agroalimentaria, el sistema agroalimentario del país siguió trabajando durante la pandemia en el suministro de alimentos y no cesó de hacerlo, en todas sus dimensiones( disponibilidad, acceso, consumo, valor nutricional), desde el campo hasta la mesa del consumidor, donde todos los eslabones están muy ligados.  El Sistema Agroalimentario fue estratégico para garantizar el abastecimiento alimentario de la población.

Sin embargo, fue posible establecer algunas vulnerabilidades ligadas al sistema de distribución de alimentos, a los trabajadores que participan en el sistema, además de vulnerabilidades ligadas a la condición socioeconómica de la población.

Tomando como punto de partida que el país ha mantenido funcionado sus mercados con relativa normalidad y de que los riesgos de desabastecimiento alimentario fueron limitados, se pudo establecer que se han presentaron algunas interrupciones en la operación de las cadenas internas de comercio y también en la cadena regional, con el cierre de la frontera entre Nicaragua y Costa Rica para el transporte de carga.

En el ámbito de los trabajadores vinculados a los sistemas alimentarios, se indica que dado que la agricultura es intensiva en mano de obra, frente al COVID-19, los trabajadores de todos los eslabones de la cadena estuvieron expuestos desde el punto de vista tanto físico como económico.

En las empresas productoras y exportadoras de alimentos en sus fases de transformación y empaque como ocurrió en la zona norte, el riesgo de contagio aumentó por la mayor proximidad física entre personas requerida para llevar a cabo las actividades y la necesidad de trabajar in situ.

Los trabajadores de los mercados mayoristas y minoristas (ferias, mercados y supermercados) siguieron trabajando en una situación de alto riesgo de contagio y sus sueldos no compensaban ese mayor riesgo y, en el caso de los repartidores de comida a domicilio, los ingresos también son bajos y la informalidad es elevada.

Mientras tanto, en la producción agrícola familiar y de pequeñas fincas, los trabajadores requieren un nivel de proximidad física con otras personas para llevar a cabo sus tareas; dichas tareas asociadas no pueden realizarse de forma remota y por ello los trabajadores siguieron circulando e interactuando entre sí, incluso en los periodos de fuerte confinamiento.

Durante la pandemia, ingresó a todas las ciudades de la Gran Area Metropolitana y centros poblados de las demás regiones, camiones con alimentos producidos por miles de agricultores y pescadores artesanales, que llegan finalmente a las mesas de los consumidores costarricenses.

Ellos se podrían haber refugiado en sus casas para evitar el contagio, pero optaron por no detener su actividad.  Es paradójico que la inseguridad alimentaria y la pobreza estén presentes en la gran mayoría de los hogares de estos agricultores, que no tienen derecho a la seguridad social, vacaciones o acceso a servicios de salud, además de que los trabajadores agrícolas presentan altos niveles de informalidad y sus ingresos son inferiores al promedio del empleo no calificado.

Con respecto a las vulnerabilidades socioeconómicas, teniendo en cuenta que la línea de pobreza extrema se determina a partir del costo de la canasta básica de alimentos, las personas que se encuentran por debajo de esta línea no cuentan con ingresos suficientes para cubrir los costos básicos de alimentación.  Esto significó que la caída económica de este año 2020(un 3.6%) repercutió directamente en la seguridad alimentaria de miles de personas y que el hambre se derivó de la pobreza (en particular, de la pobreza extrema).

Medidas que favorecieron la permanencia de la producción agroalimentaria

La implementación de políticas macroeconómicas y sectoriales para estabilizar la economía y apoyar a los sectores productivos, especialmente a las pequeñas y medianas empresas, de modo que se asegure la disponibilidad de alimentos fue fundamental. Las medidas incluyen refinanciamiento, reducción o postergación de pagos, disminución de impuestos, flexibilización de contratos y aplicación de subsidios.

Se aprobaron medidas para que los bancos de brindarán una admistía de 3 meses a las pymes y trabajadores en el pago de sus créditos y a la determinación del INDER de aplicar el no pago de los créditos en ese mismo período a más de 900 productores(Alterdes,cr,2020), medidas que ahora se solicita prorrogar por 3 meses adicionales

El Fondo Nacional para el Desarrollo (FONADE) efectuó una condonación de obligaciones financieras de primer piso que mantienen con esa entidad para 2.705 microproductores y pequeños y medianos productores agropecuarios de las diferentes zonas agrícolas del país

Por su parte, el Sistema de Banca para el Desarrollo (SBD) otorgó una moratoria en el pago de capital e intereses por hasta 6 meses en créditos con recursos del SBD para empresas con grave afectación económica y un período de gracia de hasta 12 meses en el pago de capital de operaciones financiadas con recursos del SBD para empresas con mediana afectación económica.  También brindó refinanciamiento de operaciones de crédito con recursos del SBD para capital de trabajo de emergencia y fondos no reembolsables para 200 pequeñas y medianas empresas (pymes).(FAO,Boletín, 2020)

En la adaptación de la logística de las cadenas de suministro y para que la agricultura siga funcionando han sido importantes las siguientes medidas: la adopción de nuevos protocolos sanitarios; la capacitación de la fuerza de trabajo, el ajuste del nivel de funcionamiento en las plantas agroindustriales, la reprogramación de siembras y cambios en la elección de rubros productivos, entre otras. Estas medidas han sido dirigidas a todo tipo de empresas, incluidas las fincas de la agricultura familiar.

En el reforzamiento de los programas de seguridad alimentaria estatales con el apoyo de organismos de las Naciones Unidas, se ha mantenido el programa de comedores escolares, mediante la distribución directa de bolsas de alimentos dirigidos a la población estudiantil más vulnerable, habiéndose efectuado 9 entregas de alimentos.

Ligado a la distribución de alimentos a los comedores escolares, es necesario mencionar la labor del Programa de Abastecimiento Institucional(PAI) que ha organizado la compra, acopio y envío de las bolsas de alimentos a las escuelas y comunidades.

Pero la medida más acertada fue no cerrar las ferias del agricultor que ha sido el canal de comercialización de los pequeños agricultores, que abastece cada semana el suministro de alimentos frescos en las ciudades,

También ha sido importante la articulación de los actores en redes y el fomento del comercio digital y otras opciones de circuitos cortos de comercio. En este sentido, se han establecido mercados virtuales institucionales en el Ministerio de Agricultura y en el Instituto Nacional de Aprendizaje)INA), así como mercados virtuales locales en Pérez Zeledón y la zona de los Santos.

Por su parte el programa Motor rural del Instituto de Desarrollo Rural(INDER)se enfocó en la necesidad de disminuir el impacto negativo generado por la pandemia en la condición de las familias; y por ello se dirigió a impulsar acciones para fortalecer las actividades de reactivación económicas de los territorios rurales. (ElPaís.cr, 23-9-2020)

Mercado Rural CR, ha sido un catálogo digital de Productos Rurales, para que los emprendedores y organizaciones apoyadas por el INDER en los territorios muestren sus productos, efectúen contactos directos con compradores y puedan mejorar la comercialización de sus productos.  Se trata de una plataforma totalmente gratuita para el mercadeo digital de pequeños y medianos emprendedores.

La amenaza al comercio se convirtió en una oportunidad para crear nuevos mecanismos de comercio y reveló la importancia de reforzar la institucionalidad del sector agropecuario.

La FAO en su pronunciamiento sobre los efectos de la pandemia en la seguridad alimentaria en América Latina, afirma que “para garantizar la oferta de alimentos básicos, es clave mantener el funcionamiento de las explotaciones agropecuarias, con especial atención a la agricultura familiar campesina, facilitar el transporte y acceso económico a insumos productivos (semillas, fertilizantes, piensos, etc.) y a maquinaria e infraestructura”. (FAO, Boletín, 27-4-2020).

Conclusiones

La producción agroalimentaria y algunas de sus principales cadenas productivas, se han visto afectadas por las medidas sanitarias adoptadas por la pandemia, reduciendo considerablemente el consumo y la demanda de productos alimentarios, sin embargo han logrado enfrentar los cambios en los procesos de comercialización mediante mecanismos para reducir la producción, adecuar las líneas de procesamiento y buscar mercados alternativos

El impacto de la pandemia sobre el empleo y la reducción de ingresos de la población, en efecto disminuyó el acceso a alimentos y generó inseguridad alimentaria, pero el surgimiento de bonos y ayudas estatales contribuyó a mantener el consumo de alimentos

La pandemia y el riesgo inminente de una crisis alimentaria recordaron la importancia crucial de la agricultura y los sistemas alimentarios.  La agricultura es una de las pocas actividades imprescindibles, así como son imprescindibles los bienes que produce.

La pandemia obligó a reforzar la resiliencia y la inclusión social y a no olvidar los objetivos de una agricultura más sostenible y las prácticas de adecuación al cambio climático.  La sostenibilidad ambiental de la agricultura y los sistemas alimentarios y la integración entre la agricultura y la biodiversidad, son demandas de la sociedad que cobrarán más fuerza.

En una crisis sanitaria se valora más la calidad de los alimentos, la inocuidad, la trazabilidad, las certificaciones de calidad y los atributos ambientales, sociales o culturales. Los consumidores acelerarán el cambio de sus preferencias hacia alimentos sanos, saludables y con identidad.

Durante la pandemia, se ha establecido el comercio digital, este es el nuevo concepto de cadena corta de comercio.  Se va a acelerar el surgimiento de oportunidades para la digitalización de la agricultura y con ello se incrementará la influencia de los consumidores en la definición de los modelos productivos y de los bienes generados por la agricultura.  

Según la FAO, pareciera ser que los sistemas alimentarios han resultado ser más resilientes de lo que se esperaba y que las amenazas y riesgos que podrían afectar al comercio de productos agrícolas a causa de la crisis económica, pueden ser enfrentados a través de la optimización de los canales de comunicación e información, así como implementar herramientas de inteligencia comercial con el fin de realizar un monitoreo del comercio y de la demanda de productos agroalimentarios para garantizar la seguridad alimentaria.(FAO, Boletín #12,8-2020)

martes, 3 de enero de 2023

La mayor desigualdad, retroceso en equidad y un país partido, los hallazgos del informe 2022 del Estado de la Nación

Nuevamente, el informe 2022 del Estado de la Nación, nos alerta sobre hallazgos que de alguna manera hemos conocido en informes anteriores, mediante estadísticas de pobreza y empleo del INEC o en estudios de entidades de investigación de las Universidades, pero que los medios de prensa han vuelto a destacar en esta ocasión.

Titulares como que Costa Rica tuvo en 2021 la mayor desigualdad en los últimos 35 años, Desigualdad llega a su peor nivel desde 1987, Costa Rica se nos está partiendo y Miles de hogares condenados a salir y regresar a la pobreza, revelan los hallazgos recientes del informe, ante lo que nos preguntamos que ha hecho y que está haciendo el Estado y la sociedad costarricense, para revertir esa condición de desigualdad que es ya una característica que incluso nos distingue a nivel internacional.

Reconocer que el país profundizó los rezagos sociales y económicos en la última década, que hay una parte de la población que goza de mucho bienestar, mientras un grupo cada vez numeroso está excluido de servicios esenciales, como educación, trabajo y empleo de calidad, que la alta inestabilidad de ingresos y empleos temporales es la causa de la entrada y la salida de miles de hogares de la pobreza y que la región Brunca fue nuevamente la más pobre, son hallazgos que ya no nos sorprenden, por reiterados, pero que debiera llamarnos a una profunda reflexión sobre las múltiples desigualdades, de ingreso, de riqueza, de patrimonio, de oportunidades, de género, étnicas, de capacidades, de acceso a la educación, a la salud, a la tecnología y territoriales, que existen y que reproducimos permanentemente.

En varias ocasiones, hemos analizado y presentado en estas páginas, en concordancia con el Estado de la Nación, Aportes sobre la pobreza en el 2021: la zona rural y las regiones Brunca, huetar Caribe y Norte con las peores condiciones; El índice de desarrollo humano cantonal: la realidad de las desigualdades regionales; las zonas costeras, fronterizas y rurales, nuevamente las de menor desarrollo humano; Impulsar el desarrollo de las regiones periféricas o continuar con el Gamcentrismo, el reto impostergable; Los programas gubernamentales de desarrollo regional, esfuerzos parciales y limitados frente a las persistentes desigualdades, en los que se hace referencia a todas esas fuentes de desigualdad.

La pobreza por ingresos insuficientes se mantuvo en un 23% y la pobreza extrema en 6.4% y representa casi 400 mil hogares(399.439) y 1,329.757 personas que están en pobreza total y 110.831 hogares y 393.385 en pobreza extrema, mientras que cerca de un 10% de los hogares se encuentran constantemente en riesgo de caer en pobreza o son muy vulnerables, especialmente en las regiones periféricas, Brunca, Huetar Caribe y Norte y Pacífico Central, en las que la pobreza supera el 30% de la población, no obstante escuchamos todos esos datos sin inmutarnos.

Porque la desigualdad y la pobreza, también se observa en el paisaje, sólo tenemos que mirar las diferencias en el acceso a la vivienda, a la educación, a la salud y a la tecnología, los grandes condominios y residenciales de alto costo, frente al crecimiento de barrios marginales, en las ciudades y las costas, los grandes centros comerciales, los colegios y hospitales de alto costo y la infraestructura de educación y salud pública deteriorándose, es decir es “un país partido”, pero lo hemos “normalizado”, probablemente debido a que hay “ganadores y perdedores”, como dice el Presidente.

Los programas de desarrollo social, rural y regional, los anteriores y los que aún no se conocen

Los programas de Desarrollo social, de desarrollo agropecuario y rural y de desarrollo regional suponen una fuerte inversión de recursos y una movilización importante de la acción institucional hacia sectores sociales y productivos prioritarios de la gestión pública.

Múltiples obras de infraestructura social, productiva y de servicios son el legado de los gobiernos en comunidades y regiones del país, así como la transferencia de recursos en becas, bonos y ayudas para los sectores de la población beneficiarios de la política social en las distintas Administraciones.

La Administración Alvarado realizó múltiples obras y transferencias como resultado de los programas Puente al Desarrollo, Avancemos, Crecemos, Proteger y los programas de Desarrollo agropecuario, de Desarrollo territorial rural y de los programas de Desarrollo regional ejecutados en las diferentes regiones, como Franja para el desarrollo Huetar Norte, la Mesa Caribe y los programas en las regiones Chorotega, Brunca y Pacífico Central.

Los programas, como el denominado Puente al Desarrollo coordinado por el IMAS con la participación de las demás organizaciones del sector social, el programa de desarrollo agropecuario y el programa de desarrollo rural territorial, impulsado por las instituciones del Sector agropecuario y los programas de desarrollo regional coordinados por los VicePresidentes y algunos ministros del poder Ejecutivo con la participación de diversas instituciones públicas, finalizaron su gestión dirigida a los grupos más pobres y a las poblaciones de agricultores y pobladores rurales de las regiones periféricas del país.

Aunque es difícil determinar la inversión total efectuada en todos esos programa, es posible establecer las alcances y los resultados de los programas mencionados, entre ellos la conocida como la Estrategia Nacional de Reducción de la Pobreza: Puente al Desarrollo, surgida en el año 2015, que atendió según el IMAS a 113 mil hogares desde que la Administración Alvarado planteó la ampliación de la Estrategia a través de los componentes de atención de familias “Puente al Bienestar”, la dimensión territorial comunitaria y rural “Puente a la Comunidad”, “Puente al Agro” y “Puente a la Prevención”, así como la dimensión sociolaboral “Puente al Trabajo, la cual reforzó el enfoque de derechos humanos y de atención integral a partir del paradigma de la multidimensionalidad de la pobreza, con el fin de lograr una disminución significativa de los índices de pobreza y pobreza extrema.

Mediante dicha estrategia, se atendieron poblaciones como indígena, afrodescendiente, adulta mayor, mujeres, jóvenes, LGTBIQ+, niñez, migrante y con discapacidad.  En Niñez y adolescencia, se amplió la cobertura de la REDCUDI de 52 mil personas menores de edad en 2017 a 62 mil personas en 2021. En lo relativo a Persona Adulta Mayor, se presentó el borrador de la Política Nacional de Envejecimiento y Vejez, se puso en marcha la Línea Dorada y se crearon 30 establecimientos para personas adultas mayores con los CECI’S

En cuanto a las Personas Afrodescendientes, se avanzó en las acciones de la Política nacional para una sociedad libre de racismo, discriminación racial y xenofobia 2014-2025, y se declaró de interés público a la población afrodescendiente.  Para las Personas con Discapacidad se incluyó la temática de discapacidad en los programas sobre afectividad del MEP, se promocionó el turismo accesible y programas de e-learning y entre 2018 y 2022 se aprobaron un total de 9.297 bonos familiares de vivienda para personas con discapacidad.

En lo relativo a las Personas indígenas, se creó el Plan Nacional para la Recuperación de Territorios Indígenas con un monto de  ₡3.200 millones para las indemnizaciones, la Ley 9710 permitió que a 3.500 indígenas Ngäbe-Buglés se les reconociera la nacionalidad costarricense, se benefició a  1.600 indígenas beneficiados de la atención de la CCSS y se asignaron más de ₡1.400 millones para construir cinco nuevos acueductos para territorios indígenas.

En territorios indígenas el gobierno invirtió 72 mil millones en infraestructura, conectividad, programa de servicios ambientales y reactivación económica, de los cuales ₡33.540 millones corresponden a infraestructura, ₡18.265 millones a inversión social y proyectos productivos, ₡11.810 millones a Pago de Servicios Ambientales y ₡8.310 millones a Comunidades Conectadas.

El Programa de Pago de Servicios Ambiental (PSA) del Fondo Nacional de Financiamiento Forestal (FONAFIFO), giró ₡11.810 millones a los territorios indígenas en el periodo 2018-2022, distribuidos en 143 contratos de PSA por un área acumulada de 117.052 hectáreas en zonas de bosque y 1.488.633 árboles en sistemas agroforestales.

Mientras el Instituto de Desarrollo Rural (INDER), el Ministerio de Educación Pública (MEP) y el sector vivienda han desarrollado o iniciado 92 proyectos de infraestructura, con una inversión de ₡33.534 millones entre el 2018 y el 2022, destacando la histórica inversión en vivienda que benefició a 1.186 familias, al construir el mismo número de casas, para un total de c15.398 millones. Además los proyectos son un ejemplo de la nueva relación de las instituciones con las comunidades, ya que se construyeron respetando las particularidades geográficas y culturales de los pueblos indígenas.

Además, en el 2021, se inauguraron los puestos de visita periódica en Pîedra Mesa y Bajo Bley, en el cantón de Talamanca, los cuales son obras arquitectónicas de la CCSS para dar una atención integral y pertinente a los habitantes.

El proyecto Comunidades Conectadas en Territorios Indígenas es una iniciativa de la Superintendencia de Telecomunicaciones (SUTEL), por medio del (FONATEL) y ejecutado por el Instituto Costarricense de Electricidad (ICE).  Se trata de una inversión total de $47.9 de millones, abarcando un total de 14 territorios indígenas, 138 comunidades, 86 centros de educación y 30 centros de salud, lo que permitirá el cierre de brechas digitales. FONATEL ha realizado una inversión de $12,6 millones (₡8.310.573.180) en la construcción de torres y la expansión de redes de telecomunicaciones en zonas muy remotas.

Entre las personas migrantes, el convenio firmado entre la CSS-ACNUR que permitió asegurar a 10 mil personas refugiadas durante el 2021 y para la Población LGTBIQ+, se creó un comisionado de la Presidencia para asuntos relacionados con esta población.

Por su parte se elaboró y ejecutó la Política Nacional para Hogares de Ingresos Bajos y Medios para eliminar brechas y ampliar las oportunidades de esta población en materia de crédito productivo, cuido, acceso a vivienda, entre otros y se ejecutó el Plan de salvamiento para familias altamente endeudadas, se firmó la reforma a la Ley 7769 de atención a las mujeres en situación de pobreza que agiliza los mecanismos de apoyo para mujeres emprendedoras.

En la atención integral para el cierre de brechas entre oferta y demanda laboral se creó el Sistema Nacional de Empleo que facilita el contacto entre personas y empresas, la Alianza para bilingüismo logró egresar 13.179 personas en un segundo idioma, se implementó el proyecto Emprendimiento Joven en beneficio de 284 jóvenes entre 2019 y 2022. y se firmó la Ley n° 9728 de Educación Dual. (Comunicados Presidencia1-5-2022)

En una evaluación previa del programa Puente al Desarrollo realizado a finales del 2021, se señalaba que este programa al que estaban vinculadas 19 instituciones que destinaban cuantiosos recursos a su desarrollo, de las 30 metas para el 2021, 10 metas tenían dificultades de ejecución(7 metas tenían algún tipo de rezago y tres presentaban avance cero.   El problema se presentó en dos de cuatro metas totales ligadas al componente Puente al Bienestar, en cuatro de los 12 objetivos de Puente al trabajo, específicamente en lo referente a empleabilidad y en una de dos relacionadas con empresariedad, para un total de 7 metas en riesgo de incumplirse.

A nivel general entre los obstáculos para la ejecución de los diferentes componentes,  estaban la atomización de los procesos en muchas instituciones, las brechas en el acceso a internet, los recortes presupuestarios y la falta de experiencia por parte de las instituciones en la implementación de los modelos de articulación de la población de referencia del IMAS.

En materia de ejecución presupuestaria en la estrategia Puente al desarrollo, el informe consignó que sólo seis de 19 instituciones reportaron sus niveles de ejecución y doce instituciones presentan problemas para reportar la programación financiera y controles de la ejecución del presupuesto, problema que se arrastra desde el 2020”.(CRHoy,15-10-2021)

Sobre el programa de desarrollo agropecuario, al final de su gestión el Ministro de Agricultura, detalló las inversiones realizadas en infraestructura agropecuaria, las cuales superan los ₡75 mil millones, en beneficio directo de alrededor de 237 mil personas dedicadas a la producción agropecuaria de todo el país.

Además, hizo referencia a los proyectos impulsados para fortalecer el acceso a la tierra, al crédito y a la tecnología de punta buscando reducir la brecha social en los territorios rurales y aumentar la rentabilidad y resiliencia de la actividad agropecuaria y acuícola.

Entre las grandes obras están la construcción del Centro de Valor Agregado Agropecuario de la Región Brunca  e inicio de trabajos de otro centro en Florencia de San Carlos; así como la conclusión de las obras del Mercado Regional Chorotega en Carrillo.

Además dos bodegas climatizadas para el almacenamiento de granos básicos construidas en la zona Norte y Sur del país, las cuales garantizan a quienes se dedican al cultivo de frijol, una producción segura y competitiva, así como la sostenibilidad de la comercialización a largo plazo.

Las acciones emprendidas para enfrentar el cambio climático, incluyen el impulso de los programas Nama Ganadería y Nama Café, en el primero 1.750 fincas de todo el país desarrollan medidas de adaptación, mitigación y aumento de rentabilidad. La meta a finales de 2022 es convertir 1.773 fincas ganaderas en unidades más rentables y adaptadas al cambio climático).

En sus fincas los ganaderos implementan medidas como pastoreo racional, fertirriego de purines y bioles, cosecha de agua de lluvia, establecimiento de banco forrajero, manejo de registros, mejoramiento de pasturas y ambientes ganaderos protegidos, entre otras prácticas. Gracias a estos cambios, bajan sus costos, son más resilientes y pueden desarrollar su actividad productiva de una forma más eficiente.

En otras acciones del sector, destacó la aprobación del Programa para el Desarrollo Sostenible de la Pesca y Acuicultura en Costa Rica, con financiamiento del Banco Mundial.  Además, destacó el fortalecimiento de la Fábrica Nacional de Licores, la labor desempeñada por la Oficina Nacional de Semillas y el desarrollo de nuevas variedades por parte del Instituto de Innovación y Transferencia en Tecnología Agropecuaria (INTA).

También mencionar la adquisición de drones y teléfonos inteligentes, igual que genética mejorada para la producción pecuaria y las inversiones en nuevas tecnologías.

Por su parte el INDER invirtió en el programa de desarrollo rural durante la Administración anterior, más de ₡5.500 millones en adquisición de tierras, 4.008 millones en crédito rural y ₡746 millones en plan Motor Rural.

En el acceso a recursos para producción, tierra y crédito, también se mencionó el apoyo del Instituto Nacional de las Mujer (INAMU), mediante el programa FOMUJERES, que permitió la colocación de ₡1.470 millones entre 722 proyectos ganadores, ubicados en 56 cantones; así como los apoyos distribuidos para fortalecer la producción orgánica de más de ₡970 millones  entre 735 personas productoras orgánicas y en transición. (Comunicados Presidencia 21-4-2022)

Por su parte, los programas de desarrollo regional de las regiones Huetar Norte, Huetar Caribe, Chorotega, Brunca y Pacífico Central, fueron las iniciativas que canalizaron la inversión social y productiva del poder Ejecutivo en la Administración anterior, para mejorar la infraestructura regional, reducir la pobreza y las desigualdades regionales.

Región Huetar Norte

En la región Huetar Norte, el programa Franja del Desarrollo, presentó logros en infraestructura social, de salud y educativa. En la rendición de cuentas final, se mencionaron avances en infraestructura en salud, como el nuevo Servicio de Emergencias del Hospital de San Carlos y el nuevo mamógrafo de ese hospital, los EBAIS de Cedral (San Carlos), Katira (Guatuso), Cuajiniquil y el hospital móvil en Los Chiles.

En lo que respecta a infraestructura educativa, se construyeron 19 nuevos centros educativos completos, gracias a una inversión de ₡20 000 millones, que benefician a casi nueve mil estudiantes. En el apartado de infraestructura social, una inversión de ₡8 000 millones permitió que 13 proyectos de vivienda cubrieran a 428 familias. También, se otorgó el bono comunal en la comunidad de Disneylandia (en Pital de San Carlos), que benefició a 1764 personas.

Como parte de lo realizado, se atendieron las necesidades de agua de las y los habitantes de la zona norte del país mediante 35 proyectos que beneficiaron a 237 000 personas, con una inversión de poco más de ₡34 000 millones.

Por su parte, el Instituto Mixto de Ayuda Social (IMAS) entregó dos obras de infraestructura comunal en la Región Huetar Norte: el Centro de Capacitación en Santa Rosa de Pocosol y la ampliación del acueducto de la Virgen en Los Chiles, con la ampliación del Acueducto La Virgen y El Corozo en Los Chiles -el IMAS invirtió ₡98.648.076– permitió llevar agua potable por primera vez a las viviendas de 250 habitantes de las comunidades de La Aurora, Barrio San Martí y La Chalupa.

Con una inversión de ₡100 millones, el Centro de Capacitación será un núcleo de transformación para jóvenes, mujeres y familias en situación vulnerabilidad, donde obtendrán herramientas que les permitan ser motor de bienestar para sus familias, este aporte del IMAS ha permitido a la Asociación de Desarrollo Integral de Santa Rosa de Pocosol contar con un lugar apto para emprender un plan de formación en distintas áreas de emprendedurismo, con el objetivo de revitalizar el desarrollo económico y social de las familias de los distritos de Pocosol y Cutris de San Carlos y del cantón de Los Chiles.

El Instituto Nacional de Aprendizaje efectuó la ampliación y remodelación del Centro de Formación Profesional del INA en Sarapiquí, fortalecimiento de capacidades para el turismo indígena del pueblo Maleku, capacitación a productores de leche de ganado bovino, apertura del Centro de Desarrollo Empresarial en la Regional Huetar Norte, Congreso de Producción y Comercialización de Búfalos, Jornada de Tecnología y Robótica Educativa, Expo Feria del Cacao y Chocolate.

El Instituto Nacional de Desarrollo Rural facilitó la construcción de acueducto en Coopevega, electrificación de un ramal en la zona primaria de Peñas Blancas, entrega de semilla e insumos para el cultivo de frijol a cinco asociaciones de agricultores, mejoramiento de las condiciones de acceso, senderos e infraestructura en las instalaciones del Parque Nacional Volcán Tenorio.

En el informe también se señalan los avances en conectividad; se resalta la construcción de centros de acopio; se subraya la modernización de los puestos fronterizos de Peñas Blancas y Tablillas (Los Chiles) y se destaca que el programa ‘Huella del Futuro’ ya sembró 300 000 árboles para reverdecer la Zona Norte, cifra que sobrepasó la meta inicial de 200 000 especies para setiembre de 2021.(Comunicados Presidencia 21-4-2022

Región Huetar Caribe

En el programa de desarrollo Mesa Caribe, en su informe final el gobierno registró una inversión más de ¢47 mil millones en atención social a población vulnerable de la provincia de Limón, desde el inicio del programa en febrero de 2019.

De estos recursos, ¢21.683 fueron girados por el Instituto Mixto de Ayuda Social a través de programas como Crecemos, Avancemos, Red de Cuido y Atención a Familias, cubriendo a 72.744 personas; ¢22.093 millones en subsidios de vivienda dados por el Ministerio de Vivienda y Asentamientos Humanos a 2.419 personas y ¢3.094 millones por el Ministerio de Trabajo y Seguridad Social mediante  de programas como Empléate, Obra Comunal y Obra Indígena, beneficiando a 3008 personas.

Entre los principales logros destacan, además de la inversión social, la entrega de 24 centros educativos que benefician a 10.300 estudiantes; ¢5.000 millones en formación técnica del INA para 6.500 personas; la reestructuración de JAPDEVA y la búsqueda de soluciones a los problemas de titulación de tierras.

También, el inicio del proceso para los estudios de prefactibilidad y factibilidad para la construcción de la Marina, el Muelle de Carga y Descarga y la Terminal de Cruceros a partir de fondos no reembolsables aportados por MIDEPLAN; la ampliación del aeródromo de Guápiles; la puesta en operación de la primera etapa del acueducto Caribe Sur (14-2-2020)

En materia de infraestructura vial la inversión asciende a ₡29.550 millones, lo que ha permitido intervenir unos 349 kilómetros en todos los seis cantones de la provincia. Entre las obras destacan la finalización del nuevo puente binacional sobre el río Sixaola, la intervención en más de una docena de rutas nacionales y la ejecución del programa de la Red Vial Cantonal II en Pococí, Talamanca, Siquirres y Matina.

En la ampliación y y rehabilitación de 107 km de vía entre el Cruce de Río Frío y el centro de Limón, sobre la ruta 32, se han invertido $465 millones, de los cuales $396 millones son vía empréstito con el Eximbank de China y una contrapartida nacional por $69 millones.

En otras áreas de inversión en la región Caribe el INDER invirtió entre 2018 y 2020 más ₡8.536 millones, en Infraestructura rural, crédito, transferencia de recursos a otras organizaciones para el desarrollo de proyectos y fomento a la producción y seguridad alimentaria.

En Infraestructura rural para el mejoramiento de caminos, construcción de puentes e infraestructura eléctrica, hídrica y hasta educativa realizados directamente por el Inder, se registran inversiones por ₡804,36 millones, en Crédito Rural tanto en el servicio ordinario de crédito como “Crédito en Marcha”, para apoyar a las organizaciones afectadas por más de ₡225,88 millones y en el Fomento a la producción y seguridad alimentaria en la entrega equipos, maquinaria, herramientas, semillas y otros bienes para que los productores puedan mejorar sus actividades las inversiones alcanzaron más de ₡807,22 millones.

Además, en el marco de la Mesa Caribe, entre julio del año 2020 y julio del 2021, el Instituto hizo entrega de un total de 355 títulos de propiedad a beneficiarios, de los cuales en 94 casos, permitirán a las familias contar con acceso al bono de vivienda.(CR.com,31-8-2021)

En infraestructura de vivienda, el Proyecto habitacional Barras del Caribe que se compone de 69 viviendas, de las que 26 han sido entregadas a las familias beneficiadas: 23 en la comunidad de La Lucha (Siquirres), y 3 en San Francisco (Pococí) y en En la localidad de Parismina (Siquirres) fueron concluidas tres casas y serán entregadas a las familias 16 viviendas más.

En infraestructura educativa, El MEP invirtió ₡1.230 millones en B-Line y ₡651 millones en La Herediana. la Escuela B-Line de Matina construida sobre pilotes alberga a 340 estudiantes y a 28 colaboradores entre docentes y administrativos, mientras la Escuela La Herediana, fundada en 1958, tiene 177 estudiantes (38 de preescolar y materno y 6 en estimulación temprana) y 31 docentes y funcionarios administrativos; además, en las mismas instalaciones funciona un CINDEA (Centro Integrado de Educación de Adultos), que tiene 170 alumnos.

Entre los proyectos se encuentran también el Colegio Técnico Profesional de Liverpool en Limón; Hone Creek y Finca Costa Rica en Talamanca; Villa del Mar, La Teresa, en Pococí; CTP y escuela de Pocora en Guácimo, inversión en infraestructura educativa que asciende de agosto de 2019 a finales del 2021 a ₡19.060 millones y beneficia a 9.310 estudiantes.

En las áreas de Salud de Cariari, Guápiles, Guácimo, Valle de la Estrella y Talamanca, la Caja Costarricense del Seguro Social ha destinado una inversión total ₡1.100 millones para llevar bienestar a cerca de 86.000 habitantes.

Con una inversión de más de ¢7.200 millones, en obras de construcción, remodelación y ampliación se encuentran las nuevas instalaciones del Centro Polivalente del Instituto Nacional de Aprendizaje (INA) en Limón, que incluye, laboratorios de cómputo e idiomas, aulas, ampliación del taller de soldadura y almacén regional, en el que Más de 3.500 personas podrán recibir al año Servicios de Capacitación y Formación Profesional, con una oferta de especialidades alineadas con la demanda ocupacional.

En el campo productivo, se menciona el desarrollo de 13 proyectos agroproductivos que impulsó el Ministerio de Agricultura y Ganadería (MAG), de manera articulada con otras entidades del sector, se trata de una serie de iniciativas que buscan potenciar a productores dedicados a actividades como la producción de cacao, ganadería, lácteos, avicultura, hortalizas, papaya, musáceas, con una inversión de ₡3.500 millones y con el objetivo de reducir los niveles de intermediación, mejorar los procesos de agregación de valor y el nivel de vida de las familias que dependen de este tipo de cultivos. 

En Cacao, se desarrollaron 5 proyectos, con una inversión de aproximadamente ₡50 millones, en beneficio de unas 200 familias productoras en pequeña escala, ubicadas en los cantones de Matina, Limón y Talamaca

Para la producción de lácteos en el Caribe se impulsaron 2 proyectos, con una inversión cercana a los ₡500 millones. El primero es el establecimiento de un Centro de acopio para la agroindustria de la producción de lácteos en Pococí, Cariari y El segundo proyecto es la construcción de una Planta de Procesos Lácteos de unos 30 asociados de la cooperativa Coopeasemulca

En Raíces y tubérculos, con el apoyo del MAG, INDER, CNP, Japdeva y el Centro Agrícola Cantonal de Guácimo, se han centrado en fortalecer la cadena de producción de raíces y tubérculos, con una inversión de más de ₡400 millones para el acopio, industrialización y comercialización de yuca parafinada y congelada, en beneficio de casi 300 agricultores del territorio Siquirres-Guácimo. 

En Papayase desarrolla el establecimiento y desarrollo de 124 hectáreas de papaya híbrido Pococí para exportación, promovida por la Asociación de Productores para la Exportación de Papaya (ASOPROPA) en el cantón de Guácimo. Este proyecto beneficia a 625 familias, con una inversión superior a los ₡2.300 millones.

En el programa Mesa Caribe se destacan los avances de la Zona Económica Caribe y los Clúster de Logística, Turismo y Agroindustria, como respuesta a la reactivación económica que requiere la región.

Región Brunca

En el programa de desarrollo de la región Brunca, destacan el remozamiento del Muelle Nacional de Golfito, realizado con una inversión de ₡1.208 millones, con el cual el INCOP busca brindar un servicio más eficiente. También, el nuevo paso fronterizo en Paso Canoas, que contará con un complejo de 14 edificios, bajo el concepto de “parada única” para personas, vehículos y mercancías. La inversión ronda de $30.3 millones.

Asimismo, Aviación Civil invirtió ¢6.900 millones para la modernización de los aeropuertos locales de la Región Brunca, Palmar Sur, Golfito, Pérez Zeledón, Coto 47, Drake y Quepos.

En infraestructura educativa, se menciona las nuevas instalaciones del Liceo Rural El Progreso, de Comte Burica, con un costo de ₡589 millones, que incluye  seis aulas, comedor, rancho cultural, baterías sanitarias, área administrativa, caseta para el guarda de seguridad, malla perimetral y muro de contención. En Ciudad Neily, los niños de la escuela Alberto Echandi Montero (Ciudad Neily) estrenaron instalaciones, gracias a una inversión ¢1355 millones.

Por otra parte, también resaltó la inversión de ₡1.722 millones en los parques Marino Ballena, Corcovado, Piedras Blancas, Internacional La Amistad y el Refugio Nacional de Vida Silvestre.

Además, se impulsó la declaratoria de cantonato de Puerto Jiménez y ahí se cuenta con una Casa de la Cultura, que servirá para impulsar el arte, la literatura, la poesía, la pintura, la música popular sureña, la lengua Ngobe (guami).

En las obras, el dragado del río Térraba resguardará la vida y propiedades de unas 6.000 personas de 29 poblados de Palmar Sur y Ciudad Cortés, este proyecto es ejecutado  por Senara;

Es importante destacar el aporte al desarrollo del cantón de Buenos Aires, uno de los cantones que presenta los indicadores de desarrollo más bajos de la región y el país, hacia el que se destinó una inversión total de ₡22.373 millones, dirigidos  a diferentes obras, bajo la coordinación de la Comisión Alto Nivel para la Atención del cantón de Buenos Aires

Entre otras obras desarrolladas se encuentran la construcción e instalación de tendido eléctrico en las comunidades de La Coiba de Chánguena, en Pilas-Fortuna-Ceibón; el fortalecimiento del Centro Agrícola Cantonal de Buenos Aires; el mejoramiento de caminos y edificación de puentes; entre ellos sobre el Río Ceibo, Territorio Indígena Ujarrás; así como vías en el asentamiento Río Ceibo y en el Volcán de Buenos Aires.

También, la inversión en formación técnica; la construcción de la Área de Salud Nivel 3, con especialidad quirúrgica; los esfuerzos ecosistemáticos como proyectos de Fomento a la Actividad Ganadera con Enfoque Sostenible.

El IMAS invirtió un total de ₡19.130 millones entre el 2019 y el 2022, en los programas Avancemos, Crecemos y emprendimientos productivos individuales. Además, en el contexto de la emergencia por la COVID-19, el IMAS y el MTSS en conjunto otorgaron 7.174 Bonos Proteger en el cantón de Buenos Aires.

Mediante FIDEIMAS se desarrollaron una serie de apoyos a varias asociaciones y destaca la construcción del Acueducto de San Antonio de Térraba; la Casa de Salud de Santa Lucía de Chánguena; desarrollo de la Finca Integral Agro Orgánica; el fortalecimiento económico de mujeres indígenas, entre otras.

Entre los proyectos impulsados destaca el emprendimiento de 16 mujeres integrantes de la Asociación Artesanas del Bosque de un restaurante-cafetería en el distrito de Biolley de Buenos Aires, inaugurado en 2021, con una inversión de más de ₡ 79 millones.

También 60 mujeres fueron beneficiadas con el Proyecto Desarrollo de Actividades Productivas Mujeres Indígenas de Territorios de Buenos Aires y Pérez Zeledón FAO-PC-MAG. El monto total de la inciativa es de ₡43 millones en recursos financieros y de asistencia técnica.

Adicionalmente, 40 productores han recibido asistencia técnica del Proyectos Fomento a la Actividad Ganadera con Enfoque Sostenible NAMA Ganadería. Así como de la Nueva Estación Experimental Acuícola del Sur, en Buenos Aires, proyecto ejecutado por Centro Agrícola Cantonal, que beneficia a 350 familias con una inversión superior a los ₡180 millones aportados por el MAG y JUDESUR.

Por su parte, el Instituto de Desarrollo Rural destinó ₡52 millones a tres proyectos que están beneficiando a más de 83 personas, se trata de las iniciativas: Producción de bioinsumos en Colinas y Guagaral; Shiguite (Siembra Cultivos Diversificados)- Asociación SoCagrú del Territorio Indígena Bruncajc; y la insumos a productores de granos (frijol) en Pilas y Guagaral.

También en la renovación y mantenimiento de café (Boruca); mejoramiento al acceso y seguridad del Microbeneficio La Lucha, ejecución de proyectos individuales de frijol, entre otros.

Región Chorotega

En la región Chorotega se impulsó un programa de desarrollo regional, que incluyó algunas obras importantes entre las que destacan la operación del acueducto de Bagaces, que con una inversión de ₡5.985 millones, que asegurará el abastecimiento de unas 17.000 personas de Bagaces durante los próximos 20 años.(ElPaís.com,7-4-2022) y la nueva planta potabilizadora de Cañas-Bebedero, además la construcción de los acueductos Trancas I y II, El Coco Sardinal y Costeros Santa Cruz.

También el proyecto “Mejoras en las redes de abastecimiento de agua en la Península de Nicoya”, beneficia a 3100 familias de Lepanto,paquera y cóbano con mejor servicio de agua,con la sustitución de más de 35 kilómetros de tubería y la instalación de 27 hidrantes para mejorar la calidad de vida de la población con una inversión por ¢320 millones que favorece a usuarios de 17 Asadas y a turistas en la región.

Teniendo el abastecimiento de agua como una de las prioridades de la región, destaca el impulso del Proyecto de Abastecimiento de Agua para la Cuenca Media del río Tempisque y Comunidades Costeras (PAACUME), para el que se ha asegurado la obtención del financiamiento por $425 millones.

Este proyecto garantizará el agua para consumo humano para Más de 500 mil habitantes de Carrillo, Santa Cruz y Nicoya y unas 18.640 hectáreas estarán habilitadas con riego los 12 meses del año y más de 1.200 hectáreas dispondrán del recurso para proyectos turísticos.

Según las autoridades del gobierno anterior, el proyecto PAACUME liderado por el SENARA tendrá un impacto importante en el desarrollo económico, ambiental y social de esos cantones es estratégico para la adaptación de la margen derecha del río Tempisque e inicia una nueva era para el desarrollo de Guanacaste.

En infraestructura vial, destacan las obras de ampliación y rehabilitación del tramo Cañas-Limonal sobre la Ruta Nacional 1, con una  inversión en este proyecto de $89,8 millones y el inicio de la construcción del tramo Limonal-Barranca que tiene un avance del 30%.

En vivienda, destaca El proyecto Las Palmas, ubicado en La Fortuna de Bagaces, consta de 191 viviendas, dirigido a Familias beneficiadas  por emergencias, núcleos numerosos, y personas en situación de discapacidad o adultas mayores.

En infraestructura educativa, se mencionan la remodelación de las escuelas Tomás Guardia Gutiérrez en Bagaces, María Marín Galagarza en Santa Cruz  y Cartagena.

A nivel productivo, en el cantón de La Cruz, Guanacaste, se desarrolla un proyecto acuícola y pesquero a cargo de la Asociación de Pescadores Artesanales de El Jobo de la Cruz, Pacífico Norte (ASOPAR), que con la inversión en la construcción del Centro de Acopio, Procesamiento y Comercialización de El Jobo, se beneficia a, más de 300 familias que lograron mejoran su condición económica, evitando la intermediación del producto pesquero. El Instituto Mixto de Ayuda Social (IMAS) hizo una inversión por ₡118 millones para la infraestructura y del Instituto de Desarrollo Rural (Inder) Inder de ₡35 millones en equipo y herramientas especializadas para sus labores, además de ₡10 millones para capital de trabajo..(22-4-2022,Comunicados)

En la región Pacífico Central las obras más notables fueron el Monumento Nacional Parque Mora y Cañas, tras una inversión de ₡545 millones por parte del Instituto Costarricense de Puertos del Pacífico (INCOP) y el inicio de la construcción del nuevo hospital Monseñor Víctor Manuel Sanabria Martínez, que según la Caja Costarricense de Seguro Social (CCSS), tendrá una inversión de $220 millones, evidenciando que en esta región el programa regional fue probablemente el más débil.

Los programas sociales, agropecuarios, rurales y regionales han dejado un legado de gestión e inversión social, que merecen ser evaluados y proyectados en su fortalecimiento y continuidad, o en su lugar, en la renovación o sustitución por programas de desarrollo con cometidos y propósitos similares.

Hasta el momento a casi 6 meses del inicio de la nueva Administración, se desconoce, la existencia de directrices u orientaciones de la Administración Chaves en función de la continuidad o renovación de los programas mencionados.

Aunque no se ha hecho explícita la política social de este gobierno, se presume que la estrategia puente al desarrollo, será sustituida por un programa de apoyo y transferencias a los sectores de población de menores ingresos

En los primeros 100 días de Gobierno ya se realizaron iniciativas acordes con la lucha contra la pobreza y la reducción del costo de la vida, tales como la eliminación de las tarifas mínimas de los colegios profesionales y la intervención del Centro Nacional de Abastecimiento y Distribución de Alimentos (Cenada).

Según la Presidencia, la regla fiscal y los acuerdos del Fondo Monetario Internacional permiten el uso de ¢20 mil millones para llevar asistencia a personas del país identificadas dentro del rango de pobreza para llenar sus necesidades básicas de alimentación.

Además se dará una rebaja sustancial en las tarifas eléctricas, se emprendió la lucha contra los monopolios y se agilizan los procesos institucionales.

La ruta gubernamental establece varias acciones que incluyen el uso de ¢2.500 millones del Bono Proteger para llevar empleo a familias de Guanacaste, Limón y Puntarenas a través del Programa de Obra Comunal del Ministerio de Trabajo y Seguridad Social.

Dentro de las reformas anunciadas se fusionará el Instituto Mixto de Ayuda Social (IMAS) con otras instituciones del sector social para crear el Ministerio de Desarrollo Humano para una atención más integral de grupos vulnerables.

También se reordenará y fusionará al Ministerio de Vivienda y Asentamientos Humanos (Mivah), el Banco Hipotecario de la Vivienda (Banhvi) y el Instituto Nacional de Vivienda y Urbanismo (INVU) para crear el Ministerio de Vivienda, Hábitat y Territorio.

Por su parte, en una de las directrices del Gobierno de la República hacia un sector específico, se declaró de interés público la Mesa Técnica de Asuntos Indígenas para abordar y solventar los problemas de las poblaciones indígenas.

Además, las autoridades fueron a Crucitas y a Guanacaste para conocer directamente de sus pobladores sus necesidades, ahí se hizo el lanzamiento de la Plataforma informática del Sistema Nacional de Empleo y se presenció como la educación dual está transformando vidas.(Comunicados Presidencia,17-8-2022)

Posteriormente en visita a Limón, el presidente compartió con la población limonense y anunció el bono Proteger para llevar empleo a familias de Guanacaste, Limón y Puntarenas.

 No obstante, parece claro la no continuidad de los programas regionales de desarrollo de la Administración anterior y en su lugar podrían existir subsidios y transferencias para el combate a la pobreza y la generación de empleo en las regiones costeras.

A nivel del desarrollo agropecuario se ha mencionado el fomento a la producción de aguacate y del cáñamo industrial, el impulso de la ruta del arroz dirigido a la disminución de los precios del arroz mediante la reducción de los impuestos a la importación y promover una mayor importación de arroz barato, aunque con un eventual perjuicio y desestímulo a la producción nacional.  También recientemente, se decretó el desabasto del frijol a nivel nacional, para favorecer una mayor importación del grano, así la introducción de buenas prácticas agrícolas entre los agricultores vinculados al programa de Abastecimiento institucional del CNP.

En el ámbito regional, durante la visita de las Autoridades a la región Huetar Atlántica, se anunció el impulso de 30 iniciativas de desarrollo agropecuario con una inversión de ₡1500 millones, y se realizó también el lanzamiento de la Escuela de Líderes Agrícolas”, proyecto conjunto entre el MAG y el IICA, para formar a los “nuevos agricultores del Millenium”.(Noticias MAG,31-8-2022)

Por su parte, en lo relativo a la política de desarrollo rural, el INDER ha anunciado la continuidad en la inversión rural en proyectos de infraestructura vial y productiva en las comunidades, aunque se desconoce si en las proporciones anteriores.

En definitiva, se podría indicar que aún no hay políticas, ni estrategias formuladas en desarrollo social, desarrollo agropecuario y desarrollo regional, ni un Plan de Desarrollo Nacional que las integre, solo acciones vinculadas a las promesas de campaña acerca de la reducción del costo de la vida y de la pobreza y en respuesta a las poblaciones costeras y periféricas que llevaron al poder al Presidente Chaves.